El mercado del arrendamiento de vivienda enfrenta una creciente presión. Dos factores clave, el precio y la oferta, están intensificando esta situación.

Un informe reciente de la Fundación Alquiler Seguro destaca que, aunque el parque de viviendas disponibles ha crecido durante los últimos dos años, sigue siendo inferior al nivel previo a la pandemia del coronavirus. Este descenso en la oferta disponible complica aún más el panorama para quienes buscan alquilar.

Por otro lado, el informe señala una escalada sostenida en los precios del alquiler, lo que representa un desafío significativo para los inquilinos. Este aumento en los costos de renta está tensando las relaciones entre inquilinos y propietarios, creando un entorno más competitivo y menos accesible para quienes buscan vivienda.

A medida que el alquiler se convierte en una opción cada vez más común para acceder a la vivienda, los desequilibrios entre oferta y demanda se hacen más evidentes. Esta situación genera una presión adicional en el mercado, dificultando el acceso a viviendas asequibles y adecuadas para muchos ciudadanos.tag: Economía y empleo

por redaccion